
La única manera de que no exista brecha salarial entre mujeres y hombres es la publicación de salarios por parte de las empresas.
Se necesita una buena política de empresa, una buena política de RRHH donde no se distinga por sexo o edad, sino que cada puesto de trabajo esté definido y valorado económicamente. De manera que, independientemente de quién lo realice, la persona que ocupe ese cargo cobre lo establecido por ello.
El cómo conseguir el salario definido puede estar apoyado por un plan de desarrollo, pues en ciertos casos, el trabajador sea hombre o mujer, necesita un periodo de aprendizaje hasta alcanzar la madurez en el puesto de trabajo, pero este plan también se debe definir y publicar en tiempo y salario.
Pocas empresas tienen este tipo de políticas. Por ello, es imprescindible que se defina por ley, de manera que sea de obligado cumplimiento la publicación de salarios en las empresas.
Empecemos a romper el techo de cristal por lo mas básico, por cobrar lo mismo por hacer el mismo trabajo y a partir de ahí… podremos continuar para tener las mismas oportunidades de promoción a puestos de mayor responsabilidad.